Mètodes revolucionaris per netejar la seva piscina
A las 19 h
SINOPSIS
La primera privatización de terrenos públicos está amenazando a la casa de playa ilegal de Antonis Doe junto con toda su mitología personal. Pero lo más importante es que también amenaza el futuro de sus hijos (al menos, tal y como lo ha planificado Antonis…). Decidido a luchar hasta el final para salvar «la inversión de su vida», Antonis deberá enfrentarse no solo al Estado sino incluso a sus propios hijos. Impotente y solo contra el Estado y el capital extranjero, declarará el terreno un estado independiente. Y se convertirá en un héroe aclamado. Durante un día.
En la obra de Alexandra K*, la generación vieja y «podrida» choca con la nueva y «malcriada». La ley de un solo hombre se opone en la ley estatal. Y la típica familia griega se enfrenta al reto de su propia supervivencia.
PRESENTACIÓN
Los Mètodes revolucionaris per netejar la seva piscina se escribieron a raíz de dos hechos reales. El primero, una historia del año 78, es el Estado independiente del médico Vassilis Tsironis en el barrio de Paleón Fáliro, historia que acabó con su asesinato/suicidio. El segundo, una historia que empezó en el 2010 para terminar el 2017, es la primera privatización del país en el marco de las exigencias del primer memorando. Se trata de la venta de la región de Erimitis, en el norte de Corfú, un ecosistema antes protegido que en breve acogerá 40.000 metros cuadrados de instalaciones hoteleras.
Historias que no están relacionadas pero que sin embargo plantean, ambas, los mismos interrogantes: ¿Dónde termina el Estado y dónde empieza el ser humano? ¿Dónde la ideología y dónde la supervivencia? ¿Qué significa ser un ciudadano que cumple la ley en un país que pisa sus propias leyes en perjuicio de ese mismo ciudadano? ¿Puede que un revolucionario no tenga los mismos vicios que el sistema en el que se ha criado? ¿A costa de cuántas mentiras se convierte en héroe del pueblo y cuántos ciudadanos son necesarios para hacer un Estado? Interrogantes que en el fondo tienen que ver con el concepto que cada uno de nosotros tenga de su propio papel, sus derechos y sus obligaciones dentro de cada sistema. Y que para que encuentren respuesta es necesario que cada uno por separado se remonte al primer sistema social que conocimos: nuestra familia.
De este modo, estos dos hechos se convierten en el cañamazo de una tercera historia, que no es real pero que nos es familiar a todos: la de la familia griega, carente de límites. Con las patologías y complejos que había tenido siempre, pero también con las nuevas espinas que le salen sin cesar a causa de la situación económica actual: la dependencia económica de los hijos respecto de los padres, el destete que nunca acaba de llegar, los padres de la vieja Grecia y sus ideas, los hijos de la Europa unida y sus autoengaños. La vieja «mala» generación y la nueva, la «malcriada». ¿Hasta qué punto puedes criticar a quien te alimenta? ¿Qué precio consideras que tienen los sacrificios que has realizado para tus hijos? ¿Cuánto poder tienes sobre alguien que depende económicamente de ti y cuánto sobre alguien que te ha cargado en los hombros todo el peso de su existencia?
La obra no aspira a dar respuestas, ni a hacer justicia a nadie. Todos los héroes tienen razón y todos son para matarlos. Todos son duros y todos, hace más o menos tiempo, han sido niños.
Alexandra K*
Autoría: Alexandra K*
Traducción: Pau Sabaté
Dirección: Daniel J. Meyer
Reparto: Alejandro Bordanove, Elisabet Casanovas, Paula Malia y Albert Pérez
Una producción de la Sala Beckett