Llumeneres
A las 20h
En el año 1518, en Estrasburgo, se dio una plaga extrañísima. Se dice que la paciente cero fue Frau Troffea: un día salió de casa y se puso a bailar, en tránsito. Fueron pasando las horas, fueron pasando los días y se iba sumando gente. En una semana ya eran cerca de 40 bailarines, en un mes casi 400. Los bailarines murieron de ataques epilépticos, infartos y agotamiento. Nunca se ha llegado a saber si fue la presión de una cruda sociedad feudal o una posesión colectiva lo que causó esta estraña epidemia.
Las autoridades instalan un espacio habilitado para expiar los males bailando. Empiezan a salir criaturas extrañas, cabezas parlantes, ángeles con ojos y alas y conejos que antes eran nubes.
Bajo la dirección de Montse Colomé, con la propuesta sonora de Sergi Ruiz, las luces de Sílvia Valls, y acompañados por Anna Vilamú, Oriol Sauleda saca palabras entre el público, que es invitado a bailar, porque bailando se entiende la gente y es mucho más tarde de lo que te piensas. Espectáculo promovido por Andreu Gomila, basado en el libro de poemas homónimo.
Tots teniu una funció,
que és ballar fins a extenuar-vos,
a insistir per devoció
a servir la vida amb garbo.
Som al punt de la cocció.
Soc el boig que just escarbo
quin sentit té la cançó.
Festival Alcools, poesia en escena
La poesía lo es todo y no es nada. Es una flor en un jardín cerrado, un escupitajo en la carretera, un recuerdo dulce de infancia, un golpe encima de la mesa, un grito y un silencio. Y el festival ALCOOLS, desde que nació en 2015, gracias al impulso del añorado Hermann Bonnín y bajo la inspiración de Apollinaire, busca poner en escena la poesía contemporánea con la ayuda de los amigos de los poetas, músicos, intérpretes, artistas, filósofos, y todo el mundo que piense que, hoy en día, la palabra tiene valor.
Pasaran las crisis, las guerras, los baches, los altercados, pero siempre habrá un poeta que, en medio del caos, alzará la voz para exclamar, como Sylvia Plath, que está poseído por un grito. ALCOOLS quiere ser el cobijo de las palabras, de los que dicen y de los que escuchan, una ceremonia única en tiempos, como siempre, inciertos.
Con Oriol Sauleda y Anna Vilamú
Dirección: Montse Colomé
Espacio sonoro: Sergi Ruiz
Iluminación: Sílvia Valls
Festival Alcools
Dirección: Andreu Gomila
Organiza: Sala Beckett/Obrador Internacional de Dramatúrgia